SOLEDADES
Hay tanta soledad en un abrazo
como espacios vacíos entre dos pupilas,
cínicos dedos entrelazados
carentes de afecto
insensiblemente neutros
viajan por cuerpos en armisticio
irreales, inmateriales
conversando entre
frías tazas de café
Así cruzan parejas por la acera
los veo mirar el mar
desde sus arrecifes
sin cobijas bajo la lluvia
envueltos en sus desencuentros
mudos
sin tacto
amargados
perdidos en su propia esfera
Desoladas almas
deambulan por los parques
arrastrando sus pesares
en las plantas de sus pies
pasan y engullo
un sentimiento de culpa
por todas las soledades
de este mundo.
David Pérez Núñez
Sto. Domingo, República Dominicana
Revista Dúnamis Año 9 Número 9 Octubre 2015
Página 7